5 recetas fáciles y saludables para niños a los que no les gusta comer verduras

Cuidar la alimentación de los niños puede ser un auténtico reto, especialmente cuando se trata de incluir en su dieta alimentos saludables como verduras.

Muchos padres se enfrentan a la resistencia de sus pequeños a la hora de comer verduras, lo que puede generar preocupaciones sobre la nutrición y el equilibrio de las comidas. Sin embargo, es posible hacer que las verduras sean más atractivas y sabrosas, convirtiéndolas en una parte deliciosa y divertida de la dieta de un niño.

En este artículo hemos reunido 5 recetas fáciles y saludables que conquistarán el paladar de los niños, incluso de aquellos que suelen despreciar las verduras. Con combinaciones creativas, sabores atractivos y texturas agradables, estas opciones no solo son nutritivas, sino que también pueden transformarse en platos que a los pequeños les encantan.

Además de ser sencillas de preparar, las recetas que aquí descubrirás tienen el poder de aumentar tu consumo de verduras sin tener que recurrir a estrategias forzadas. Introduciendo las verduras de forma paulatina y deliciosa, ayudas a tus hijos a desarrollar el gusto por alimentos más saludables, a la vez que contribuyes a su crecimiento y desarrollo de forma equilibrada y divertida. ¿Nos vamos?

1. Nuggets de Pollo con Verduras

Una alternativa saludable a los tradicionales nuggets, llena de sabor y muy nutritiva.

Ingredientes:

  • 2 pechugas de pollo, picadas en cubos
  • 1 zanahoria rallada
  • 1 calabacín pequeño, rallado
  • 1/2 taza de copos de avena fina
  • 1 huevo
  • Sal y pimienta al gusto
  • 1 cucharadita de ajo en polvo (opcional)
  • Aceite para engrasar

Método de preparación:

  1. En un procesador de alimentos, muele el pollo hasta que se convierta en una pasta.
  2. En un bowl, mezcla el pollo procesado, la zanahoria, el calabacín, la avena y el huevo. Sazone con sal, pimienta y ajo en polvo, si lo desea.
  3. Forme pequeñas pepitas con la mezcla.
  4. Calienta una sartén con un poco de aceite de oliva y fríe los nuggets hasta que estén dorados y crujientes por fuera, unos 5 minutos por cada lado.
  5. Sirva con salsa de yogur o ketchup casero. ¡A los niños les encantará!

2. Tortitas de espinacas

¡Tortitas súper fáciles de hacer e ideales para camuflar las espinacas de una manera deliciosa!

Ingredientes:

  • 1 taza de espinacas frescas (finamente picadas)
  • 1 taza de harina de avena o trigo
  • 1 huevo
  • 1/2 taza de leche
  • 1 cucharadita de levadura en polvo
  • 1 cucharada de aceite de oliva o de coco
  • Sal y pimienta al gusto

Método de preparación:

  1. En un bol batir el huevo con la leche y el aceite de oliva.
  2. Agrega la harina, la levadura, las espinacas picadas, la sal y la pimienta y mezcla bien hasta que se forme una masa homogénea.
  3. Calienta una sartén antiadherente a fuego medio y engrasa ligeramente con aceite de oliva.
  4. Coloque cucharadas de la masa en la sartén, formando pequeños panqueques. Cocine durante 2-3 minutos por cada lado, hasta que esté dorado.
  5. Sirve las tortitas con fruta, miel o un poco de queso rallado por encima. ¡Una comida completa y saludable!

3. Muffins de plátano y zanahoria

Una opción saludable y sabrosa para la merienda de los niños, llena de fibra y nutrientes.

Ingredientes:

  • 1 plátano maduro, triturado
  • 1 zanahoria mediana, rallada
  • 1/2 taza de harina de avena
  • 1/2 taza de harina integral
  • 1/4 taza de miel o sirope de agave
  • 1/4 taza de aceite de coco o de oliva
  • 1 huevo
  • 1 cucharadita de levadura en polvo
  • 1/2 cucharadita de canela molida
  • 1 pizca de sal

Método de preparación:

  1. Precalienta el horno a 180°C y engrasa un molde para muffins o coloca vasos de papel en él.
  2. En un bol, mezcle el puré de plátano, la zanahoria rallada, la miel y el aceite de coco. Añade el huevo y mezcla bien.
  3. En otro tazón, combine las harinas, el polvo para hornear, la canela y la sal.
  4. Agrega los ingredientes secos a los ingredientes húmedos, mezclando hasta que la masa quede homogénea.
  5. Extiende la masa en los moldes para muffins y hornea durante 15 a 20 minutos o hasta que al introducir un palillo salga limpio.
  6. Deje enfriar antes de servir. ¡Estos muffins son perfectos para un snack saludable y sabroso!

4. Sopa de calabaza y yuca

Una sopa cremosa y nutritiva, ideal para calentar los días de frío y conseguir que los más pequeños consuman verdura.

Ingredientes:

  • 2 tazas de calabaza picada
  • 2 mandioquinhas (o patatas baroa) medianas, picadas
  • 1 cebolla picada
  • 2 dientes de ajo picados
  • 1 litro de caldo de verduras o agua
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • Sal y pimienta al gusto
  • 1 cucharadita de nuez moscada (opcional)
  • Hojas de albahaca fresca para decorar (opcional)

Método de preparación:

  1. En una sartén grande, calienta el aceite de oliva y saltea la cebolla y el ajo hasta que estén dorados.
  2. Agrega la calabaza y la yuca picadas, mezcla bien y agrega el caldo de verduras o agua.
  3. Cocine durante unos 20 minutos o hasta que las verduras estén muy suaves.
  4. Licuar la sopa en una licuadora o con batidora hasta obtener una crema suave y homogénea.
  5. Sazone con sal, pimienta y nuez moscada al gusto.
  6. Sirva con hojas de albahaca fresca para darle un toque especial. Esta sopa es deliciosa y nutritiva, ideal para los niños.

5. Espaguetis de calabacín con salsa de tomate y queso

Una versión saludable de los espaguetis tradicionales, que utilizan calabacines como “pasta” y una salsa de tomate casera.

Ingredientes:

  • 2 calabacines medianos cortados en tiras finas (como espaguetis)
  • 2 tomates maduros, picados
  • 1 diente de ajo picado
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • 1/4 taza de queso parmesano rallado
  • Sal y pimienta al gusto
  • Albahaca fresca para decorar (opcional)

Método de preparación:

  1. Calienta el aceite de oliva en una sartén y saltea los ajos hasta que estén dorados.
  2. Agrega los tomates picados y cocina hasta que suelten su salsa, formando una salsa de tomate simple. Sazone con sal y pimienta al gusto.
  3. En otra sartén, saltee las tiras de calabacín durante 3-4 minutos, hasta que estén ligeramente suaves pero aún crujientes.
  4. Mezcla los espaguetis de calabacín con la salsa de tomate y agrega el queso parmesano rallado.
  5. Sirva con albahaca fresca encima. ¡Esta es una manera divertida y saludable de reemplazar la pasta de trigo!

Las fotografías contenidas en este artículo tienen fines ilustrativos únicamente.

Estás aquí:

Utilizamos cookies para ofrecerte la mejor experiencia en nuestra web. Al continuar navegando, confirmas que aceptas estos términos.